Serotonina; usa correctamente este collar y te sentará muy bien (I)

La serotonina es un neurotransmisor central que juega un papel muy importante en el humor, la ansiedad, el sueño... También en el dolor, la conducta alimentaria y sexual, así como en el control hormonal hipotalámico.

De la totalidad de la serotonina (5-HT) que somos capaces de sintetizar en el organismo, el 95% se produce en nuestro tracto gastrointestinal; en la células llamadas enterocromafines distribuidas a lo largo del epitelio intestinal. El 5% restante es sintetizado en neuronas a las que llamamos serotoninérgicas (dependientes de la Serotonina), la mayor parte de las cuales están alojadas en el sistema nervioso central y en el sistema nervioso entérico.

Para que nuestro organismo pueda elaborar serotonina, necesitamos de un aminoácido especial, el cual extraemos fundamentalmente de los alimentos, llamado L-Triptófano (seguro que ya han oído hablar de él con anterioridad). 

Además, la serotonina es un precursor de la melatonina (más conocida si cabe que el Triptófano, ¿verdad?), una hormona promotora del sueño que está involucrada en el establecimiento del ciclo sueño-vigilia. Cuando es de noche induce el sueño y permanece elevada hasta que sale el sol, y empieza a descender. Pero nuestro estilo de vida actual, tiene un serio incoveniente; en estos tiempos, al caer el sol seguimos con luces artificiales, ordenadores, incluso con los móviles hasta minutos antes de intentar dormir, estropeando el proceso de activación-descanso (mi compañero Pablo Abad nos habló de ello en este FORO IEP).

La importancia de la serotonina no acaba aquí; este neurotransmisor es capaz de modular la respuesta inmune de nuestra mucosa intestinal. ¿Qué pasa cuándo esta mucosa no está bien regulada? En consulta observamos muchos síntomas asociados al Síndrome de Intestino Irritable, por ejemplo, incluso a la fibromialgia, que viene derivados de esta respuesta inmune. Acaba sucediendo que muchas personas consumen triptófano (5-HPT) como suplemento para regularse. Esto no es una mala idea, aunque advertimos a nuestros pacientes que debe hacerse con una barrera inmunológica intestinal lo más sana posible. Debemos saber que nuestras bacterias, hongos y patógenos en general, suelen alimentarse de este aminoácido, con lo cual aumentaremos mucho su proliferación... pero conseguiremos una mínima transformación de este aumento en serotonina. Cuidado con esto.

Finalmente, la deficiencia de serotonina puede provocar un tipo conducta obsesiva o rígida. 

(N.A; en la segunda parte del artículo, abordaremos algunos datos sobre la producción de Serototina, y daremos algún consejo para mejorar los niveles de este neurotransmisor tan importante para nuestra salud. Os dejamos con un resumen musical del último FORO IEP antes de las vacaciones)

 

BIBLIOGRAFÍA

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