El estilo de vida como factor de riesgo

Tras presentar nuestra metodología de trabajo con la empresa, que hemos bautizado como BIBERN (Biorritmo, Behaviour/Conducta, Ejercicio, Rest/Descanso y Nutrición), y cuyo objetivo es alcanzar nuestro Máximo Potencial de Rendimiento (MPRº), seguimos en la línea de ofrecer información relevante a nuestros clientes. 

Las enfermedades crónicas tienen enormes repercusiones tanto a nivel económico como social, tanto que viene siendo una prioridad mundial. La Asamblea Nacional de Naciones Unidas en 2011 celebró una reunión monográfica entre máximos especialistas dedicada a su prevención y control (1). Al tiempo, la OMS ha elaborado el Plan de Acción Mundial para las Enfermedades no Transmisibles 2013-2020 (2) a través de la puesta en marcha de la Estrategia Mundial sobre Régimen Alimentario, Actividad Física y Salud (3).

El ámbito laboral se convierte por tanto en un elemento clave de consideración, siendo reconocido por la OMS como lugar prioritario para la promoción de la salud (4). Como quiera que sea, nuestra ocupación profesional es la principal causa de sedentarismo en gran parte de los países industrializados (5).

La inactividad física, ya se considera el cuarto factor de riesgo en lo que respecta a la mortalidad mundial, según nos advierte la Encuesta Nacional de Salud, dirigida por el Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad y publicada en 2014 (6). Aproximadamente 3,2 millones de defunciones anuales pueden ser atribuidas a una actividad física insuficiente. Esto supone un alarmante 6% del total de muertes registradas (7, 8). En la región europea se le atribuye un millón de muertes anuales, el 10% del total. Para España, se ha estimado que el 13,4% de las muertes por todas las causas podrían evitarse si todas las personas cumplieran las recomendaciones mundiales (9).

El Ser Humano actual, está expuesto a un ambiente que ha cambiado de forma dramática desde la Revolución Industrial. En la últimas décadas el desarrollo tecnológico ha sido tal, que hemos cambiado nuestro estilo de vida por completo (10). Como consecuencia, la actividad física ha dejado de ser necesaria y así, más del 75% de los seres humanos no alcanza la cantidad mínima de actividad física recomendable (11), el 72% de los tipos de comida moderna resultan novedosos para la evolución del ser humano (12), la exposición a factores generadores de estrés psico-emocional se ha incrementado y la exposición del ser humano a un flujo constante de información es tal, que resulta apabullante.

Todos estos factores combinados generan el contexto ideal para mantener una respuesta inmunitaria innata junto con unos ejes de estrés crónicamente activos que facilitan el desarrollo de procesos inflamatorios (10).

¿Cómo podemos construir un mundo mejor para trabajar? Es la pregunta que se plantean en este vídeo nuestros amigos de EY.

Referencias

1. Asamblea General de Naciones Unidas. Sexagésimo sexto período de sesiones. Declaración Política de la Reunión de Alto Nivel de la Asamblea General sobre la Prevención y el Control de las Enfermedades No Transmisibles. 16 de septiembre de 2011. http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/66/L.1

2. Asamblea Mundial de la Salud. Sexagésimo sexto período de sesiones. Proyecto de plan de acción para la prevención y el control de las enfermedades no transmisibles 2013-2020. http://apps.who.int/gb/ebwha/pdf_files/WHA66/A66_9-sp.pdf

3. Asamblea Mundial de la Salud. Quincuagésimo séptimo período de sesiones. Resolución WHA57.17. Estrategia mundial sobre alimentación saludable, actividad física y salud. Ginebra. Organización Mundial de la Salud 2004. http://www.who.int/gb/ebwha/ pdf_files/WHA57/A57_9-sp

4.  World Health Organisation (WHO). http://www.who.int/mediacentre/ factsheets/fs311/en/index.html. Accessed 3 Jun 2013.

5. British Heart Foundation National Centre (BHFNC) for Physical Activity and Health. 2012. Sedentary behaviour evidence briefing. http://www. bhfactive.org.uk/files/525/sedentary_evidence_briefing.pdf. Accessed 3 Jun 2013.

6. Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Encuesta Nacional de Salud. España 2011/12. Actividad física, descanso y ocio. Serie Informes monográficos no 4. Madrid: Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, 2014.

7. Lim SS, Vos T, Flaxman AD, Danaei G, Shibuya K, Adair-Rohani H et al. A comparative risk assessment of burden of disease and injury attributable to 67 risk factors and risk factor clusters in 21 regions, 1990- 2010: a systematic analysis for the Global Burden of Disease Study 2010. Lancet, 2012; 380(9859):2224- 2260.

8. Mathers C, Stevens G, Mascarenhas M. Global health risks. Mortality and burden of disease attributable to selected major risks. Geneva, World Health Organization, 2009 (http:// www.who.int/healthinfo/global_burden_disease/GlobalHealthRisks_report_full.pdf, accessed 22 December 2010).

9. Lee IM, Shiroma EJ, Lobelo F et al. Effect of physical inactivity on major non‐communicable diseases worldwide: an analisis of burden of disease in life expectancy. Lancet 2012; 380: 219‐29.

10. Bosma-den Boer M, Van Wetten ML, Pruimboom L. Chronic inflammatory diseases are stimulated by  current lifestyle: how diet, stress levels and medication prevent our body from recovering. Nutrition & Metabolism 2012, 9:32. http://www.nutritionandmetabolism.com/content/9/1/32

11. Pruimboom L: Physical inactivity is a disease synonymous for a non- permissive brain disorder. Med Hypothesis 2011, 77:708-713.

12. Cordain L, Toohey L, Smith MJ, Hickey MS: Modulation of immune function by dietary lectins in rheumatoid arthritis. Br J Nutr 2000, 83:207-217.